PARA MIS BUENOS AMIGOS FANATICOS DEL BEISBOL:
La decisión de la Puerto Rico Baseball League (antes Liga de Béisbol Profesional de Puerto Rico) de eliminar las actuales franquicias de los Cangrejeros y Senadores es una que, además de lamentable, produce sospecha en cuanto a cuales son las verdaderas motivaciones detrás de una decisión que claramente ignora la rica historia del béisbol en la capital a la vez que demuestra nuevamente la incapacidad de los directores de nuestro béisbol profesional.
Es importante aclarar, desde mi punto de vista, que esta decisión es la culminación de un proceso que comenzó con la mudanza de los Senadores a Carolina en la década de los 90's. O sea, que técnicamente la franquicia original de los Senadores aún existe aunque no ha tenido necesariamente en Carolina el éxito económico y el respaldo masivo que en un momento se anticipo. Independientemente de ello, dicha mudanza en combinación con la venta de los Cangrejeros al empresario dominicano Julio Hazim, años mas tarde, marcaron el principio del fin del beísbol en el Estadio Hiram Bithorn, hogar de estas gloriosas franquicias. Hazim y sus fatídicas estrategias de mercadeo impactaron negativamente a casi todas las franquicias, comenzando un proceso de dramático descenso en las asistencias a los parques, principalmente en el Bithorn.
Poco tiempo después, Hazim decide vender los Cangrejeros al pelotero Tony Valentín, quien desesperadamente buscaba comprar un equipo de béisbol profesional para entonces mudarlo a su pueblo natal de Manatí, transacción que fue aprobada sin pena ni gloria por la entonces Liga de Béisbol Profesional de Puerto Rico (LBPPR), decisión carente de todo tipo de análisis o estudio en cuanto a la viabilidad de una franquicia profesional en un mercado pequeño. Luego de la mudanza del cangrejo, la LBPPR intento sin éxito revivir las franquicias de los Senadores y Cangrejeros mediante la mudanza de franquicia original de los Lobos de Arecibo al Bithorn, realmente un truco y engaño al fanático de la capital, lo cual se hizo de forma improvisada y que no causo ningún impacto positivo ni generó ningún interés a mediados de la pasada década.
Finalmente cuando Tony Valentín, ante el fiasco de Manatí, decide devolverle los Cangrejeros al Bithorn, al final de la década pasada, ya el daño estaba hecho. Dicho regreso, carente de una estrategia de publicidad y mercadeo y efectiva y dirigida por un propietario, que públicamente manisfestaba que no contaba con la capacidad económica para operar la franquicia, y todo ello dentro de un marco de improvisación y falta de interés de parte de la Puerto Rico Baseball League (PRBL) para revivir el béisbol en el Bithorn, propició que los Cangrejeros recesaran por dos (2) años consecutivos, lo que en la práctica fue la estocada final al béisbol en San Juan.
Durante los dos (2) años del receso cangrejero la PRBL, dirigida por su Presidente Sadí Antonmattei, ha dado cátedra de la incapacidad e ineptitud para revivir el béisbol en la Capital y el resto del país. Antonmattei se pasó por dos (2) temporadas consecutivas prometiendo y garantizando el regreso de Santurce, haciendo en todo momento el ridículo y quedando desacreditado ante el fanático al no poder hacer valer las garantías ofrecidas.
En este proceso ha resultado muy fácil para Antonmattei responsabilizar al Alcalde Jorge Santini y a la fanaticada por el poco respaldo. Ciertamente la administración municipal y los fanáticos tendrán que asumir su responsabilidad. No obstante la historia apunta hacia la LBPPR, sus directivos y a Antonmattei como los principales responsables de una comedia de errores que culmina con el entierro de una de las tradiciones más importantes del deporte en las últimas siete (7) décadas.
Por último, no olvidemos que tan reciente como el año pasado Antonmattei hablaba del regreso de los Cangrejeros y Senadores al Bithorn como la salvación de nuestro béisbol profesional. Expresiones realizadas dentro del marco de la mudanza de sus Lobos de Arecibo al Bithorn para pasar a ser los nuevos Senadores en manos de unos empresarios dominicanos. Otro truco y engaño a la fanaticada capitalina, motivado por los intereses de Antonmattei de vender el equipo arecibeño y capitalizar económicamente, realizado de forma atropellada, improvisada y a última hora, lo que resultó ser otro fracaso más de la vergonzosa gestión del actual Presidente.
Pero cabe preguntarse, por qué Sadí y la PRBL no optaron por cederle a los empresarios dominicanos la operación de los Cangrejeros? Acaso no resultaba lo más sensato que Santurce regresara a su hogar en vez de traer un equipo de Arecibo? Cuales eran las motivaciones de Antonmattei en insistir en el traslado de SUS Lobos y colocarse en un evidente conflicto de intereses? Por que Antonmattei habla de expulsar de la PRBL a los empresarios dominicanos que el mismo invitó y 72 horas más tarde la misma PRBL decide eliminar la franquicia?
Por que en el 2010 Antonmattei pensaba que el regreso de los Senadores y Cangrejeros era la salvación del béisbol profesional y doce (12) meses más tarde dirige un proceso apresurado e improvisado para darle muerte a dos (2) franquicias de una tradición e historia que evidentemente no conoce e ignora? Si ya la PRBL decidió de antemano jugar con cuatro (4) equipos esta temporada, cual es la urgencia y apuro para eliminar a los Cangrejeros y Senadores para siempre del béisbol? Acaso la PRBL no debió esperar a que concluyera esta temporada y pasar juicio sobre la viabilidad de un formato de cuatro (4) equipos antes de tomar tan drástica decisión?
Es por todo lo anterior, que la decisión tomada por la PRBL y su Presidente, además de desafortunada y lamentable, resulta altamente sospechosa.
TEXTO por Juan González
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