RAFAEL A. NADAL ARCELAY, presidente de la CBPPR |
A continuación, la expresión de la Comisión y su presidente
Nadal Arcelay.
El pasado 27 de enero de 2013, el Secretario del
Departamento de Recreación y Deportes, Ramón Orta, tuvo a bien nombrarme Presidente
de la Comisión de Boxeo Profesional de Puerto Rico.
Inicié las labores de dicha encomienda con una conferencia
de prensa en la cual enfaticé la realidad de que dicha Comisión y sus
integrantes no son los protagonistas del Boxeo; lo son los Boxeadores.
Además, incluyéndome en la agenda del Secretario Orta, comenté
la necesidad de que la Comisión pusiera de su parte en la urgencia de país de
promover la economía y crear empleos. Sobre este particular esbocé unas ideas
que impulsaré personal y profesionalmente, desde una posición neutral,
beneficiando a todos en el Boxeo.
Sobre la Comisión, sus ejecutorias, decisiones, deberes y
responsabilidades tan solo puedo asegurar que las mismas continuarán llevándose
a cabo de la forma más íntegra y recta que organismo alguno pueda actuar en
nuestro país. Esa ha sido la historia de la Comisión que siempre ha contado con
profesionales de conducta intachable que lo único que han hecho es dedicar
tiempo a ésta de manera desinteresada y sin ánimo de lucro alguno.
Tenemos que tener presente que la Comisión es un ente
regulador, fiscalizador, que su única responsabilidad en el mundo del Boxeo es
velar porque los procesos relacionados a la actividad boxística del país se
conduzcan de la forma adecuada, en cumplimiento estricto de las normas aplicables.
El cometido principal
de la Comisión dentro del complicado mundo del Boxeo, en el cual convergen
múltiples intereses, es similar a la del juzgado, al extremo que le rige en sus
decisiones la Ley de Procedimiento Administrativo Uniforme. Inclusive, soy de la
opinión que debemos guardar en la “dignidad del silencio”, nuestras reacciones
a comentarios u opiniones sobre todo aspecto relacionado a la Comisión.
Es evidente, que la Comisión no es responsable del número de
carteleras que se celebran en nuestro país, del éxito o fracaso de las mismas
desde la perspectiva del fanático o de cuántos Boxeadores disfrutan de faja de
Campeones. En fin estos aspectos y otros, no delegados a la Comisión, que
definen el estado o condición del Boxeo en el país, están fuera del alcance de
la Comisión. Extender la jurisdicción de la Comisión a asuntos más allá de su
reglamento, se presta a malinterpretaciones que ciertamente merecen
preocupación y el repudio de todos.
El secretario del DRD, Ramon Orta, izquierda, junto a Toto Penagaricano y Nadal Arcelay. |
Por eso, hago esta única expresión pública para atestiguar a
todos que la Comisión de Boxeo Profesional de Puerto Rico continuará sin ambage
alguno su labor fiscalizadora; que atenderá sus responsabilidades
reglamentarias, lo cual da la seguridad de un trato similar, seguro y confiable
a todos los concernidos en el Boxeo y que tendremos siempre presentes al que más
se sacrifica en todo este proceso que vigilamos, el Boxeador, que en la mayoría
de las ocasiones no alcanza fama y fortuna y dedica su vida a la profesión del
Boxeo, recibiendo muy poco a cambio.
A ese Boxeador, sin el que no tendríamos razón de ser,
nuestro respeto y compromiso inquebrantable de que haremos todo lo que siempre
esté a nuestro alcance para protegerle y asegurarle sus mejores condiciones en
el desempeño de su trabajo en la arena del cuadrilátero.
Por último, agradezco a todos aquellos que se han comunicado
para respaldar a la Comisión de Boxeo Profesional de Puerto Rico, la cual me
honro en presidir.
Respetuosamente,
Rafael A. Nadal Arcelay
Presidente
Comisión de Boxeo Profesional de Puerto Rico
No hay comentarios:
Publicar un comentario