El boricua Carlos Beltrán empalmó un par de jonrones para llegar a 300 en su carrera y Tim Lincecum dejó atrás una racha de tres aperturas sin victoria, en el duelo que los Gigantes de San Francisco ganaron el miércoles 3-1 a los Padres de San Diego para completar una rara barrida frente a este club.
Beltrán dijo que no había tenido tiempo de pensar en el hecho de que estaba a punto de llegar a los 300 cuadrangulares. Después de todo, en menos de dos meses ha habido muchos cambios en la vida del puertorriqueño: se mudó de un extremo al otro del país y sufrió un problema en una muñeca, que lo llevó a la lista de los lesionados.
Pero una vez alcanzado el hito, Beltrán dijo que es importante para él.
"Esto significa mucho para mí en realidad. Gracias a Dios por esto, por poder jugar este deporte durante mucho tiempo", dijo Beltrán, con las dos rodillas envueltas en hielo y todavía aquejado por un dolor en la mano. "Trescientos jonrones, para un tipo de Manatí, un pueblo pequeño de Puerto Rico, no está nada mal".
Beltrán es el sexto puertorriqueño en llegar a los 300 bambinazos.
Conectó un vuelacerca en el primer inning y uno más en el sexto, sumergiendo la pelota en la Ensenada McCovey, para que los Gigantes tomaran la ventaja. Fue el 30mo duelo en que el toletero ha conectado más de un jonrón. Además, es la tercera vez que lo logra en el año y la primera que lo hace desde que llegó a San Francisco en un canje con los Mets, el 28 de julio.
"Beltrán es uno de los mejores peloteros en la Liga Nacional", reconoció el manager de los Padres, Bud Black.
Lincecum (13-12) superó en el duelo a Mat Latos (7-14) para cosechar su primera victoria desde el 24 de agosto, cuando se impuso a los Padres.
El batazo con el que Beltrán sumergió la pelota fue el cuarto que los toleteros de los Gigantes envían a la ensenada en el año. Es la 83ra vez que alguien lo consigue en el parque, inaugurado hace 12 años. Barry Bonds lo logró en 35 ocasiones.
"El hace que este parque parezca pequeño a veces", dijo el manager de los Gigantes, Bruce Bochy, respecto de Beltrán.
Beltrán pegó también un vuelacerca por encima del muro de ladrillo que delimita el jardín derecho, para empatar el duelo en la primera entrada. Bateó de 12-7 (.583) con un doble, tres jonrones y cuatro impulsadas en la serie, y tiene un promedio de .520 (25 de 13) con cuatro vuelacercas en siete encuentros contra San Diego esta temporada.
TEXTO y FOTOpor MLB
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